¿Cuándo su sistema ya está obsoleto?
En algunas ocasiones nos reunimos con ejecutivos de bancos y los escuchamos decir que aún tienen sistemas en Cobol o RPG. La mayoría se preguntará qué es eso, pues son lenguajes de programación de los años 70 y parte de los 80 que aún se usan y, más aún, en sistemas medulares (“core”) de gran responsabilidad que por su complejidad y riesgo no se atreven a cambiar.
Entonces, ¿que un sistema haya sido desarrollado hace 30 o 40 años lo hace obsoleto? La respuesta es “no”.
En nuestra opinión, un sistema es obsoleto cuando ya no permite una mejora continua en los procesos de la empresa. Por ejemplo, si hoy se necesita que la empresa descentralice su trabajo para mejorar el servicio al cliente o las ventas, y se requiere que el sistema sea accesible vía web y esto no es posible, podría decir que su sistema tiene que ser modernizado o complementado con una nueva tecnología.
Otras consideraciones a tener en cuenta son el costo de mantenimiento del sistema, que no tenga actualizaciones, que no le brinden soporte técnico, que no pueda aprovechar los avances tecnológicos de las nuevas versiones del hardware y software base, entre otras.
Mientras el sistema acompañe a la empresa en su crecimiento, el sistema no estará obsoleto. Un típico error es dar por obsoleto un sistema por un tema de “moda”, “tendencia tecnológica” o peor aún por “status”, dejando de lado su confiabilidad, su adaptación a la empresa, su rapidez, etc.
En nuestra opinión, antes de declarar obsoleto un sistema, primero debe asegurarse que podrá encontrar algo mejor, a buen precio, con buen soporte. De no ser así, no descarte mantener el sistema y busque o desarrolle módulos modernos (con nuevas tecnologías) que lo complementen.
De hecho, un día llegará el momento de cambio, pero que esto sea producto de una buena planificación y que la empresa se prepare con tiempo para enfrentar el proyecto con éxito. Y a antes de tomar la decisión, piense que por algo los bancos aún mantienen sistemas de hace décadas.